Las baterías son componentes esenciales para el funcionamiento de cualquier dispositivo en movilidad sea un portátil, tablet o smartphone, ya que son las que nos permiten usarlos sin depender de redes de energía que no siempre están accesibles. Su cuidado y mantenimiento es vital para maximizar su autonomía y rendimiento, así como maximizar su vida útil.
La mejora de la capacidad de las baterías de última generación, la rebaja de consumo en procesadores, memorias o unidades de almacenamiento, y la gestión energética por software de sistemas operativos como Windows 11, han compensado las necesidades de diseño de portátiles cada vez más delgados y ligeros. El uso de tecnologías de baterías prismáticas o los formatos de doble batería (más pequeñas, pero con mayor número de placas en total) han ayudado a cumplir el sueño de tener autonomía para todo un día de trabajo. Todo ello en situaciones ideales porque como decíamos es un componente que hay que cuidar expresamente.
Cuidados de la batería de un portátil
Y es que las baterías son componentes fungibles que no duran para siempre ya que se desgastan con cada ciclo de carga y recarga y van perdiendo capacidad. Sin embargo. hay una serie de cuidados para intentar minimizar ese desgaste, conservar la mayor parte de su capacidad durante más tiempo y en definitiva prolongar la vida útil de la batería. Te recordamos los más importantes.

Temperatura
La temperatura de funcionamiento tiene un impacto enorme en la vida de la batería de un portátil. Las baterías operan mejor a temperatura ambiente, entre 20 y 25 grados. Evita en la medida de lo posible grandes variaciones de la temperatura y cuida las temperaturas extremas de frío-calor en invierno o verano. Especialmente en la temporada vacacional actual a pleno sol en la playa o en la piscina. Si se ha sobrecalentado y puedes hacerlo, espera a que vuelva a la temperatura ambiente antes de volver a ponerlo en marcha.
Retira la batería
Si no vas a utilizar el equipo durante algunos periodos o tienes instalado fijo el portátil en un escritorio conectado a la red eléctrica, puedes retirar la batería si es reemplazable. La mejor forma de hacerlo es cargarla hasta un 40-50% y guardarla en un sitio fresco y seco porque la humedad también les afecta negativamente. De vez en cuando, vuelve a conectarla y realiza al menos un ciclo de carga completo para evitar que se deteriore. Lamentablemente, el uso masivo de baterías integradas lo ha dificultado. Los reguladores de mercado están en camino de resolverlo y por ejemplo en la Unión Europea en 2027 será obligatorio que los smartphones tengan baterías intercambiables.

Limpieza y colocación
Mantener limpios los contactos de la batería es obligatorio como también limpiar el teclado y el resto del portátil con regularidad para evitar que el polvo se introduzca dentro del equipo obstruyendo rejillas y ventiladores, perjudicando la refrigeración de componentes, batería incluida. Situar el equipo en una almohada, manta u otra superficie blanda puede calentar el equipo y afectar a la batería. Se recomienda usar una almohadilla de enfriamiento cuando se utiliza un ordenador portátil en el regazo, evitando situarlo en estas superficies blandas.
Ciclos de recarga
Por mucho que mejoren las tecnologías de baterías, cada carga y descarga recorta su vida útil de forma irreversible. Con un buen mantenimiento, debería conservar el 80 por ciento de su autonomía al menos durante los primeros 18 meses de uso. En las nuevas baterías no es necesario agotar la batería para recargarla. De hecho se recomienda recargas parciales evitando que la carga de la batería descienda del 15%, exceptuando cuando realicemos procesos de calibración. Al menos una vez al mes, realiza un ciclo de carga completo.

Voltaje
Los problemas con voltajes incorrectos de alimentación o picos de corriente son la otra gran causa que limita la vida útil de una batería. Utiliza siempre el adaptador original que incluye el equipo. La forma correcta de desconectar un ordenador portátil del alimentador es retirar la toma de red de la pared y, después, el conector del equipo. Sigue los pasos contrarios para realizar una conexión correcta y evitar problemas de tensión. Señalar que no es perjudicial mantener tu equipo conectado a la red eléctrica con la batería instalada. Hace años que incluyen tecnologías para evitar sobrecargas y drenaje de batería. Los equipos modernos incluyen un circuito de protección que evita que la batería se cargue o descargue más allá de los límites de seguridad.
Software y calibración
La industria ofrece software que informa del estado de la batería, ayudas de diagnóstico y resolución de posibles problemas con la batería. La mayoría de fabricantes lo incluyen en sus aplicaciones de control. También están disponibles aplicaciones especializadas de terceros que pueden monitorizar en tiempo real la batería, comprobar su estado, determinar su número de ciclos y ayudar a realizar las calibraciones, una técnica necesaria a realizar cada cierto tiempo para exprimir al máximo el rendimiento de la batería y que consiste en agotar la batería por completo. Los sistemas operativos Windows permiten gestionar varios parámetros relacionados desde las ‘opciones de energía’.

Disfruta de tu portátil
Seguir las recomendaciones anteriores ayudará a prolongar la vida útil de la batería, pero no te obsesiones. Como decíamos, las baterías son componentes fungibles con fecha de caducidad. Disfruta de tu equipo y utiliza la batería cuando la necesites. Cuando detectes que tu autonomía ha bajado más de lo esperado, compra una batería original en un distribuidor oficial para evitar poner en riesgo tu equipo y tener total garantía de seguridad.
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