Durante la última semana han aparecido una gran cantidad de rumores que dan por hecho que Sony trabaja en una PS6 portátil, y esto ha generado muchas dudas y preguntas sobre cómo podría ser, y sobre que configuración de hardware podría utilizar esta consola.
También he visto que en los últimos días han aparecido otros rumores de fuentes que no son fiables, y que estos han llegado a decir auténticos disparates. Uno de los más sonados fue la especulación de que Sony debería utilizar procesadores diferentes en PS6 portátil y en PS6, algo que como os contamos en su momento no tiene ni pies ni cabeza.
Sé que este es un tema que os interesa mucho, y por eso hemos decidido dar forma a este artículo donde os vamos a contar todo lo que sabemos hasta el momento sobre PS6 portátil. También compartiremos con vosotros una estimación de las posibles especificaciones técnicas de esta consola que realmente sí tiene sentido, y que podría cumplirse tal cual sin ningún problema.
Cómo sería PS6 portátil
Imagen: Devin.
Será una consola portátil de próxima generación configurada con un hardware más avanzado que el de la generación actual. Sin embargo, no debemos dejar que su nombre nos lleve a engaños, ya que tendrá una potencia inferior a PS5, y en teoría no será capaz de mover los juegos de PS6.
Su diseño debería ser similar al de las consolas portátiles tradicionales, lo que significa que podemos esperar el clásico diseño con pantalla en el centro, un stick analógico a cada lado, y cruceta, botones y gatillos repartidos de la misma manera que ya hemos visto en consolas como la Steam Deck y la ASUS ROG Ally.
No esperamos ninguna novedad importante ni a nivel de diseño ni de ergonomía, y tampoco en la experiencia de juego, que debería ser totalmente tradicional. Esto tiene una explicación muy simple, y es que no creo que Sony quiera correr riesgos intentando innovar con esa PS6 portátil, y preferirá centrarse en promocionarla como una consola potente capaz de mover juegos de PS5.
Lo más lógico es que PS6 portátil tenga una pantalla de entre 7 y 8 pulgadas, y que esta tenga resolución 1080p. La resolución de pantalla es muy importante, porque:
Determina la calidad de imagen.
Influye en el nivel de exigencia en juegos. Más resolución requiere de una GPU más potente para mover juegos con fluidez, y 1080p es la resolución más equilibrada para una portátil.
También afecta al consumo de batería, e influye en la autonomía de la consola.
Una pantalla con más resolución no tiene sentido en una portátil, porque la mayor densidad de píxeles por pulgada no compensa en una pantalla tan pequeña, y porque disparará el consumo de energía y afectará negativamente al rendimiento.
Posibles especificaciones de PS6 portátil
Pantalla IPS de 7 u 8 pulgadas con resolución 1080p y tasa de refresco de 120 Hz compatible con VRR (tasa de refresco variable). Esta pantalla le permitiría ejecutar juegos con el modo de 40 FPS, como hace Nintendo Switch 2.
SoC AMD Ryzen fabricado en el nodo de 3 nm de TSMC con procesador AMD Ryzen de 8 núcleos basado en la arquitectura Zen 5 o Zen 6.
GPU integrada AMD Radeon basada en la arquitectura UDNA. Esta GPU podría estar configurada con 2.304 shaders para facilitar la compatibilidad con juegos de PS5 y PS4.
16 GB de memoria unificada. Este sería el valor mínimo para asegurar un buen nivel de rendimiento con juegos de PS5, pero nada impediría a Sony montar 24 GB o incluso 32 GB de memoria.
Unidad de almacenamiento SSD en formato M.2 2230 con una velocidad de al menos 5,5 GB/s, también para asegurar una compatibilidad sin fisuras con los juegos de PS5.
Tecnologías y mejoras frente a la generación anterior
Aunque PS6 portátil no va a ser más potente que PS5 sí que va a contar con nuevas tecnologías, y utilizará arquitecturas más avanzadas que marcarán una gran diferencia sobre todo en términos de rendimiento por vatio consumido, un valor muy importante que al final es el que determina las capacidades reales de una consola de este tipo.
No debemos olvidar que estamos hablando de una consola portátil, y que en este tipo de sistemas el consumo del SoC es fundamental tanto por cuestiones térmicas (calor generado a dispar) como por la batería (autonomía por carga). En este sentido, lo más probable es que Sony opte por implementar un modo de 15 vatios, aunque no descarto que acabe dando al usuario la posibilidad de activar un modo superior de 25 o 30 vatios para aumentar el rendimiento a cambio de una menor autonomía.
Tener un modo de 15 vatios y otro de 25 o 30 vatios podría servir para diferenciar entre dos modos, el modo rendimiento y el modo calidad en juegos. Con el primero los juegos se ejecutarían a menor resolución para mantener una buena fluidez con un consumo de 15 vatios y tener una mayor autonomía, y con el segundo ocurriría precisamente todo lo contrario. Sería una buena idea.
El salto al nodo de 3 nm podría permitir a AMD hacer grandes cosas con ese nuevo SoC, que sería una solución personalizada para Sony, es decir, algo exclusivo para esa PS6 portátil, y no una simple versión de los Ryzen Z Extreme. Al utilizar un nodo más avanzado se reduce el tamaño de los transistores, y esto significa que ocupan menos espacio a nivel de silicio.
Gracias a esto, AMD podría integrar una GPU con más shaders en una pastilla de silicio con un tamaño más contenido en comparación con nodos anteriores. Esto tendría un impacto positivo a nivel de costes, ya que un chip más pequeño ocupa menos espacio en la oblea, y esto quiere decir que podemos conseguir más chips por cada oblea.
PS6 portátil sería compatible con AMD FSR 4
Ahora mismo AMD tiene GPUs integradas como la Radeon 8060s que ya cuenta con 2.560 shaders, y está fabricada en el nodo de 4 nm de TSMC, así que no es una locura pensar en un SoC Ryzen personalizado con una GPU integrada equipada con 2.304 shaders fabricada en 3 nm para dentro de dos o tres años.
Por fechas, lo más lógico sería que la GPU de PS6 portátil utilice la arquitectura UDNA de AMD. Si esto se confirma, esa GPU tendría núcleos para IA de tercera generación, lo que significa que sería compatible con AMD FSR 4, una tecnología de reescalado inteligente mejorado por IA y acelerada por hardware.
La CPU compartirá empaquetado con la GPU, y debe tener al menos 8 núcleos para asegurar una compatibilidad perfecta con los juegos de PS5. No tengo claro si esos núcleos utilizarán la arquitectura Zen 5 o Zen 6, pero ambas opciones tienen sentido. Con todo, Zen 5 podría ser mejor opción para reducir costes.
Llegados a este punto hay que tocar una cuestión muy importante, la velocidad de trabajo de la CPU y de la GPU de PS6 portátil. Con el modo de 15 vatios sería necesario establecer unas velocidades de trabajo muy ajustadas que probablemente rondarían los 1,5 GHz de máximo en la CPU y 1 GHz de máximo en la GPU. Bajo un modo de 25 o 30 vatios esas frecuencias podrían incrementarse hasta los 2 GHz y 1,5 GHz en CPU y GPU.
Tened en cuenta que hacer una estimación de frecuencias en una portátil siempre es complicado, y que al final CPU y GPU utilizan frecuencias dinámicas que se ajustan en tiempo real según las necesidades de cada juego. Esto quiere decir que si un juego depende más de la CPU esta recibirá más potencia para subir su velocidad de trabajo, y que como contrapartida la GPU reducirá su velocidad de trabajo.
Memoria y ancho de banda, un importante cuello de botella
En cualquier sistema que utilice una GPU integrada la memoria siempre se convierte en uno de los cuellos de botella más importantes, porque esta utiliza la RAM como memoria gráfica, y esta no solo es mucho más lenta que la memoria gráfica, sino que además suele utilizar un bus más pequeño, lo que reduce significativamente el ancho de banda.
Sony resolvió este problema con PS5 utilizando un bus de 256 bits y memoria unificada de tipo GDDR6 a 14 Gbps. Con PS6 portátil podría recurrir a una configuración con memoria LPDDR6, que tendrá un ancho de banda de entre 10,66 y 32 Gbps. Los primeros chips serán más lentos, y su ancho de banda irá aumentando con el paso del tiempo.
Una PS6 portátil con 16 GB de LPDDR6 a 28 Gbps y un bus de 128 bits tendría un ancho de banda de 448 GB/s, que es precisamente el mismo ancho de banda que tiene una PS5. Este ancho de banda permitiría a la GPU integrada de esta consola ofrecer un rendimiento muy elevado, y estoy convencido de que sería clave para conseguir un buen desempeño con juegos de PS5.
Si esta consola utiliza 16 GB de LPDDR6 a 20 Gbps con un bus de 192 bits su ancho de banda sería de 480 GB/s. Os doy este dato para que veáis que Sony tiene muchas opciones para conseguir una configuración con un ancho de banda equivalente o incluso superior al de PS5.
¿Qué rendimiento podemos esperar?
Depende de muchos factores, así que vamos a partir de una configuración concreta para hacer una estimación. Si PS6 portátil monta una CPU Zen 5 con 8 núcleos, una GPU Radeon UDNA con 2.304 shaders y 16 GB de LPDDR6 a 20 Gbps con un bus de 192 bits tendríamos un sistema bastante capaz de mover juegos de PS5 en resolución 1080p.
Esa consola tendría una potencia de 9,2 TFLOPs en FP32 bajo el modo de 15 vatios (si la GPU funciona a 1 GHz). El dato de potencia incluye los shaders de doble emisión, así que sin estos su potencia sería de 4,6 TFLOPs. Con un modo de 25 o 30 vatios que suba la velocidad de la GPU a 1,5 GHz la potencia sería de 13,82 TFLOPs en FP32 con shaders de doble emisión, y de 6,91 TFLOPs sin estos.
Estos números confirman que PS6 portátil sería más potente que Xbox Series S, pero menos potente que PS5. Tened en cuenta que los shaders de doble emisión inflan mucho la potencia bruta en FP32, pero que en realidad no marcan una gran diferencia en juegos, y que por tanto el valor máximo realista de potencia que tendríamos sería el de 6,91 TFLOPs.
Hay otro detalle que debemos tener también en cuenta, y es que más allá de la potencia bruta PS6 portátil contará con una ventaja importante frente a PS5, el soporte de AMD FSR 4. Esta tecnología podría permitirle reescalar desde 540p a 1080p manteniendo un buen nivel de nitidez y de calidad de imagen, y hará que sea mucho más fácil conseguir los niveles de fluidez y de rendimiento objetivo (30, 40 o 60 FPS) en juegos.
Cuándo podría llegar PS6 portátil y qué precio tendrá
Aunque todavía no hay nada confirmado, todo apunta a que Sony podría presentar PS6 portátil entre 2027 y 2028 de forma conjunta con PS6. El precio de venta dependerá en gran medida de la configuración de hardware que acabe escogiendo Sony para esa consola.
Si la compañía japonesa realmente quiere dar forma a un sistema capaz de mover juegos de PS5 sin que se requieran parches milagrosos, solo optimizaciones y cambios moderados, tened claro que el precio de la consola rondará entre los 500 y los 600 dólares.
No es ninguna locura teniendo en cuenta el precio de Nintendo Switch 2, y considerando los precios que tienen otras consolas portátiles actuales, que en sus configuraciones más potentes llegan a superar sin problema los 1.000 euros.
Imagen de portada: Devin.
La entrada Cómo podría ser PS6 portátil, posibles especificaciones, rendimiento y arquitectura se publicó primero en MuyComputer.