Es oficial, NVIDIA ha confirmado que las tarjetas gráficas GeForce GTX 900 y GeForce GTX 10 dejarán de recibir soporte tras el lanzamiento de la rama de drivers 580. Estos serán los últimos que darán soporte a ambas generaciones de tarjetas gráficas, así que a partir de ahí ya no recibirán nuevos drivers, y quedarán abandonadas.
Esta decisión afecta también a ciertos modelos de la serie GTX 700 que todavía tenían soporte por estar basadas en la arquitectura Maxwell, como las GeForce GTX 750 y GTX 750 Ti, y también a Volta, una generación exclusiva para el sector profesional que fue la primera en contar con núcleos tensor especializados en IA.
Con este cambio, el soporte a nivel de drivers queda limitado a las GeForce GTX 16, basadas en Turing, y superiores. La verdad es que es un movimiento razonable, porque las GeForce GTX 10 llegaron al mercado en 2016, lo que significa que ya tienen nueve años de antigüedad, y las GeForce GTX 900 llegaron en 2014, así que han tenido un ciclo de vida de 11 años.
Cómo afectará esto a las GeForce GTX 900 y GeForce GTX 10
Es importante tener en cuenta que ambas generaciones todavía recibirán actualizaciones de drivers, y que el final del soporte tendrá lugar tras el lanzamiento de los drivers de la rama 580, así que no estamos hablando de un final inmediato y absoluto. Todavía falta un tiempo para que esto ocurra.
Por otro lado, cuando se finalice el soporte a nivel de drivers esto no implica que ambas generaciones de tarjetas gráficas vayan a dejar de funcionar. Nada más lejos de la realidad, seguirán funcionando, y no darán problemas ni a corto ni a medio plazo. Solo a largo nos empezaremos a encontrar con algunos problemas que, poco a poco, se irán haciendo cada vez más importantes.
Básicamente es lo mismo que está ocurriendo desde hace tiempo con la Radeon RX 580, por poner un ejemplo conocido. Esta lleva tiempo sin recibir nuevos drivers, y a pesar de todo funciona a la perfección con muchos juegos nuevos, pero con algunos presenta errores y fallos gráficos. Spider-Man 2 es uno de los juegos que tiene este tipo de problemas con dicha tarjeta gráfica.
Esa historia se repetirá con las GeForce GTX 900 y GTX 10, dos generaciones que han sido de lo mejor que ha lanzado NVIDIA en muchos años. Ambas arquitecturas salieron tan buenas que a día de hoy todavía se puede jugar a muchas cosas con una GeForce GTX 970, y la GeForce GTX 1070 sigue siendo capaz de mover muchísimos juegos actuales en 1080p con ciertas garantías.
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