Microsoft ha relanzado Windows Recuerdos (Recall en inglés) tras un retraso de casi un año sobre lo previsto inicialmente. Lo que prometía ser la aplicación estrella de las funciones de inteligencia artificial de la plataforma PC Copilot+, llegó a provocar el retraso en el lanzamiento de la actualización Windows 11 2024 Update ante las críticas de lo que fue calificado como «una pesadilla para la privacidad».
Microsoft retiró la función y prometió abordar las preocupaciones de privacidad y seguridad con una serie de cambios que se probarían primero en el canal Windows Insiders. También anunció que su uso sería opcional y que el usuario podría deshabilitar la función. Finalmente, un año después, vuelve a estar disponible en fase de vista previa y según el anuncio, se lanzará al canal general en la actualización de mayo.
Ya sabes que Recall es una aplicación IA que funciona guardando instantáneas, lo que viene a ser capturas de pantalla de las actividades que realiza un usuario con su computadora para volver a ‘recordarlas’ cuando así se requiriese. Teniendo en cuenta el historial de Microsoft en materia de privacidad (véase el lanzamiento de la versión inicial de Windows 10) el acceso masivo a las actividades del usuario que permitía monitorizar patrones de  comportamiento y recopilar datos personales, sonaba terrible. Tampoco se clarificó cómo se tomaban los datos ni el alcance de los mismos. Y para rematar el fiasco, su uso era obligatorio porque formaba parte del sistema.

Qué ha cambiado en Windows Recuerdos
Microsoft ha abordado las preocupaciones de seguridad y privacidad hasta el punto de que David Weston, vicepresidente de seguridad de Microsoft, asegura que Recall es «la experiencia más segura de Windows». La función es opcional y no solo podrá desactivarse, también podrá desinstalarse del sistema operativo.
«A la gente le preocupaba que alguien pudiera activarlo subrepticiamente», dice Weston, razón por la cual Microsoft incluyó la opción de desinstalación. Podrá reactivarse más tarde, pero solo se podrá configurar y activar por completo si el usuario se registra en Windows Hello, el método de inicio de sesión de la compañía que requiere huella dactilar o escaneo facial. «Así que la primera vez que se activa la función de recuperación, hay que demostrar biométricamente que es el propio usuario quien ha iniciado la sesión», añade Weston. 
Otra protección importante es el cifrado. Microsoft diseñó Recall para que funcionara con cifrado de extremo a extremo, impidiendo que el malware, o incluso la propia Microsoft, accediera a los archivos de Recall. La compañía insiste en ello y asegura que todos los datos permanecen en el PC del usuario y nunca se envían a la empresa, ni se comparten entre cuentas de usuarios que usen el mismo PC.
En este apartado, Microsoft ha reforzado Windows Recuerdos al trasladar las claves de cifrado de Recall y los datos de captura de pantalla del sistema operativo Windows 11 al chip TPM, enfocado en la seguridad. «Toda la información relacionada con esto se almacena en una máquina virtual independiente. Esto significa que, incluso si se infectara con malware y el sistema principal se viera comprometido, esa información cifrada nunca llegaría al sistema principal», explican.
Otra preocupación de Recall es su potencial para guardar contraseñas o información personal confidencial que aparezca en el PC. En respuesta, Weston afirma que Microsoft ha estado introduciendo «filtros de aplicaciones» que prometen detectar datos, como números de la Seguridad Social, y evitar que salgan en las capturas de pantalla. «Tenemos un conjunto inicial de filtros que nos comprometemos a actualizar constantemente para mejorar».
¿Suficiente para usar esta aplicación? Tú decides. Windows Recuerdos se lanzará al canal general en la actualización de mayo. Seguirá siendo exclusiva para Windows 11 y equipos que formen parte de la plataforma Copilot+.
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