Las tarjetas gráficas de bajo consumo son una opción muy interesante para montar PCs económicos, y también para actualizar equipos que ya tienen unos años sin tener que cambiar la fuente de alimentación, porque al tener un consumo reducido suelen funcionar sin problemas incluso con fuentes de poca potencia.
Con la evolución de las diferentes arquitecturas gráficas de NVIDIA y AMD hemos visto una tendencia clara al aumento del consumo de las tarjetas gráficas, sobre todo en la gama alta. Por ejemplo, la GeForce RTX 5090 ha marcado un punto de inflexión con su consumo medio de 575 vatios, y también podemos encontrar versiones de la Radeon RX 9070 XT que traen un overclock elevado, y que se acercan a los 350 vatios de consumo medio en juegos.
Por suerte las tarjetas gráficas de bajo consumo todavía tienen una presencia notable en el mercado, sobre todo dentro de la gama media, aunque los modelos sin conector de alimentación adicional son cada vez más raros y difíciles de encontrar, y su rendimiento no es suficiente para poder jugar con garantías a títulos actuales.
La última tarjeta gráfica de este tipo que llegó al mercado fue la GeForce RTX 3050 de 6 GB, un modelo muy caro para lo que ofrece, y que como os contamos hace solo unos días es una tarjeta gráfica que no vale la comprar. Su potencia es parecida a la de una GeForce GTX 1060 de 6 GB, aunque tiene la ventaja de contar con núcleos tensor y núcleos RT.
Que son las tarjetas gráficas de bajo consumo
Son aquellas tarjetas gráficas que no necesitan más de un conector de alimentación adicional de 8 pines, y cuyo consumo real en carga no supera los 150 vatios de media. Gracias a ese consumo tan bajo estas tarjetas gráficas pueden funcionar sin problemas con fuentes de alimentación de 400 vatios, lo que reduce significativamente el gasto que tenemos que hacer en dicho componente.
Por ejemplo, un PC formado por un Ryzen 5 5600X, 16 GB de DDR4 en dos módulos de 8 GB, una unidad SSD PCIe M.2 de 1 TB, un kit AIO de refrigeración líquida de 240 mm y una GeForce RTX 5060 tendrá un consumo medio en carga de entre 280 y 290 vatios, aproximadamente. Con esa fuente de alimentación de 400 vatios tendríamos margen de sobra.
Las tarjetas gráficas de bajo consumo tienen, además, otra ventaja importante, y es que no necesitan de un procesador muy potente para poder desarrollar todo su potencial, así que podemos combinarla con componentes muy económicos y no tendremos que preocuparnos en ningún momento por un posible cuello de botella.
También suelen tener un diseño muy compacto, un precio asequible, y un funcionamiento fresco incluso con sistemas de refrigeración modestos. Esto hace que sean una solución muy recomendable para montar equipos de pequeño tamaño, y también para dar forma a PCs con un bajo nivel de ruido.
Qué tarjeta gráfica de bajo consumo elegir: recomendaciones
1.- GeForce GTX 1650 GDDR6
Este modelo es una opción muy interesante si buscamos en el mercado de segunda mano, ya que tiene un consumo muy bajo, funciona incluso con fuentes de alimentación de 300 vatios y todavía es capaz de mover juegos no muy exigentes en 1080p en condiciones aceptables.
La GeForce GTX 1650 GDDR6 tiene un TGP de solo 75 vatios, no necesita de un conector de alimentación adicional, y se puede comprar de segunda mano por unos 40-50 euros. Una opción excelente para actualizar un PC muy antiguo, ya que se lleva bien incluso con procesadores Intel Core 2000 (Sandy Bridge) y AMD Ryzen de primera generación.
En términos comparativos, su rendimiento es parecido al de una GeForce GTX 970-Radeon RX 570, pero utiliza una arquitectura más actual y todavía tiene soporte completo a nivel de drivers.
Arquitectura Turing, núcleo TU117.
896 shaders a 1.410 MHz-1.590 MHz.
56 unidades de texturizado.
32 unidades de rasterizado.
Bus de 128 bits.
TGP de 75 vatios.
4 GB de GDDR6 a 12 Gbps.
2.- GeForce RTX 4060
Una tarjeta gráfica bastante potente para el consumo que tiene, y una de las más eficientes que ha lanzado NVIDIA hasta la fecha. Utiliza un conector de alimentación adicional de 8 pines, pero su TGP es de apenas 115 vatios, así que funciona sin problemas con una fuente de alimentación de entre 350 y 400 vatios, dependiendo del consumo del resto de componentes del equipo.
Es una solución perfecta para actualizar un PC antiguo, o un PC más moderno con una fuente de alimentación muy poco potente, y se lleva bien con procesadores muy económicos, como los Ryzen 5 5500 e Intel Core i5-10400.
A nivel de rendimiento, la GeForce RTX 4060 es capaz de mover juegos actuales en 1080p con garantías, incluso títulos muy exigentes. Ha sido sucedida recientemente por la GeForce RTX 5060, que es más potente, pero también resulta más cara y tiene un consumo mayor. Se puede comprar por menos de 300 euros.
Arquitectura Ada Lovelace, núcleo AD107.
3.072 shaders a 1.830 MHz-2.460 MHz.
96 unidades de texturizado.
48 unidades de rasterizado.
96 núcleos tensor.
24 núcleos RT.
Bus de 128 bits.
TGP de 115 vatios.
8 GB de GDDR6 a 17 Gbps.
Necesita un conector de alimentación de 8 pines.
3.- GeForce RTX 5060
La nueva tarjeta gráfica de gama media de NVIDIA trae todos los avances de la arquitectura Blackwell, aumenta el rendimiento frente a la generación anterior, pero también sube el TGP hasta un punto que se queda cerca del límite de lo que podemos considerar como una tarjeta gráfica de bajo consumo.
Este modelo tiene un TGP de 145 vatios, y necesita un conector de alimentación adicional. Ofrece un rendimiento más que suficiente para jugar sin problemas a cualquier título actual. En términos de potencia bruta está al mismo nivel que una GeForce RTX 4060 Ti de 8 GB, pero cuenta con la ventaja de soportar multigeneración de fotogramas.
Es perfectamente viable utilizar esta tarjeta gráfica con una fuente de alimentación de 400 vatios, siempre que esta tenga el conector necesario, ya que con la mayoría de configuraciones recomendadas para esta gráfica tendremos un consumo de entre 280 y 320 vatios.
Arquitectura Blackwell, núcleo GB206.
3.840 shaders a 2.280 MHz-2.497 MHz.
120 unidades de texturizado.
48 unidades de rasterizado.
120 núcleos tensor.
30 núcleos RT.
Bus de 128 bits.
TGP de 145 vatios.
8 GB de GDDR7 a 28 Gbps.
Necesita un conector de alimentación de 8 pines.
Alternativas si no te importa un consumo algo más elevado
Si tu límite está en un consumo medio máximo de 200 vatios tienes otras opciones que son interesantes, y que ofrecen un mayor nivel de rendimiento que las anteriores. No obstante, ten en cuenta que en estos casos ya será necesario contar con una fuente de alimentación más potente, y que algunos modelos requieren dos conectores de alimentación.
1.- AMD Radeon RX 7600
Si buscas una gráfica de AMD esta es una opción a tener en cuenta, sobre todo ahora que ha bajado bastante de precio, lo que ha mejorado considerablemente su valor precio-prestaciones. Si puedes conseguirla por 260 euros o menos sería buena compra, ya que ofrece un buen rendimiento en 1080p, y puede con juegos actuales.
Su TGP es de 165 vatios, necesita un conector de alimentación adicional de 8 pines, y también es viable utilizarla con una fuente de alimentación de 400 vatios partiendo de la configuración base vista anteriormente, es decir, de un Ryzen 5 5600X, 16 GB de DDR4, un SSD de 1 TB y un kit AIO de 240 mm.
Ofrece un rendimiento casi idéntico al de la GeForce RTX 4060, y tiene la misma cantidad de memoria gráfica, así que es un modelo diseñado para jugar en 1080p.
Arquitectura RDNA 3, núcleo Navi 33.
2.048 shaders a 1.720 MHz-2.655 MHz.
128 unidades de texturizado.
64 unidades de rasterizado.
32 núcleos para trazado de rayos.
Bus de 128 bits.
TGP de 165 vatios.
8 GB de GDDR6 a 18 Gbps.
Necesita un conector de alimentación de 8 pines.
2.- GeForce RTX 5060 Ti de 16 GB
Una de las tarjetas gráficas más potentes de esta categoría, ya que tiene un TGP de 180 vatios, rinde más que la Radeon RX 7700 XT, que tiene un TGP de 245 vatios, y solo necesita un conector de alimentación adicional de 8 pines.
El modelo de 16 GB es el más recomendable porque la diferencia de precio frente al modelo de 8 GB es pequeña, y porque esa configuración la convierte en una tarjeta gráfica viable para jugar tanto en 1080p como en 1440p.
Si tenemos un PC compuesto por un Ryzen 5 7600, 32 GB de DDR5 en doble canal (dos módulos de 16 GB cada uno), una unidad SSD PCIe NVMe, seis ventiladores y un kit de refrigeración líquida de 240 mm con la GeForce RTX 5060 Ti de 16 GB el consumo medio del equipo será de unos 360 vatios.
Esto quiere decir que una fuente de 400 vatios se quedaría algo justa, y que lo ideal en este caso sería contar al menos con una fuente de 450 vatios. A partir de una fuente de alimentación de 500 vatios iremos sobrados.
Arquitectura Blackwell, núcleo GB206.
4.608 shaders a 2.407 MHz-2.572 MHz.
144 unidades de texturizado.
48 unidades de rasterizado.
144 núcleos tensor.
36 núcleos RT.
Bus de 128 bits.
TGP de 180 vatios.
16 GB de GDDR7 a 28 Gbps.
Necesita un conector de alimentación de 8 pines.
3.- GeForce RTX 4070
Esta tarjeta gráfica tiene un TGP de 200 vatios. Con ella superamos en 50 vatios el tope de 150 vatios que hemos puesto para definir en qué nivel se mueven las tarjetas gráficas de bajo consumo. No es mucho, así que la diferencia de consumo no será muy grande.
El cambio más importante que representa esta tarjeta gráfica es que necesita dos conectores de alimentación adicional de 8 pines, o un conector de 16 pines. Si tenemos un PC compuesto por un Ryzen 5 7600, 32 GB de DDR5 en doble canal (dos módulos de 16 GB cada uno), una unidad SSD PCIe NVMe, seis ventiladores y un kit de refrigeración líquida de 240 mm, el consumo total con la GeForce RTX 4070 será de unos 380-390 vatios.
En este caso lo recomendable sería contar al menos con una fuente de alimentación de calidad con una potencia de 500 vatios, y lo ideal sería un modelo con una potencia de entre 550 y 600 vatios, para reducir la carga máxima de la fuente y maximizar el nivel de eficiencia.
Con la GeForce RTX 4070 tendremos potencia suficiente para jugar a cualquier título actual en 1440p con todas las garantías, incluso con los juegos más exigentes, y es viable también en 2160p. Es una de las mejores tarjetas gráficas que podemos comprar de segunda mano, siempre que el precio no se dispare.
Arquitectura Ada Lovelace, núcleo AD104.
5.888 shaders a 1.920 MHz-2.475 MHz.
184 unidades de texturizado.
64 unidades de rasterizado.
184 núcleos tensor.
46 núcleos RT.
Bus de 192 bits.
TGP de 200 vatios.
12 GB de GDDR6 a 21 Gbps.
Necesita dos conectores de alimentación de 8 pines, o uno de 16 pines.
La entrada Tarjetas gráficas de bajo consumo, guía completa se publicó primero en MuyComputer.